Embrumadas por la
burocracia duermen y despiertan a veces historias mínimas, que en un visto y no
visto sólo dejan una leve señal en el aire y en ocasiones ni eso. De un día
para otro pasas por el mismo paisaje y algo que no acertarías a explicar qué
es, lo ha cambiado. Casi siempre para mal.
Pero a veces...
Veamos la pequeña crónica de algo muy importante
Veamos la pequeña crónica de algo muy importante
Así, limpios sus muros, amanecía la iglesia Basílica de San Hipólito el Real de Támara, Palencia, el 29 de Agosto de 2013 (Fotos A.Mª.F.) |
En primavera, cubierta de verde y maleza junto a la iglesia. |
En invierno, una buena vista de la ruina que tanto ha costado eliminar. (A.Mª.F.) |
LA BELLA DEL CAMINO
Publicado en Gaudí y Más. 30 de Mayo de 2014
Publicado en Gaudí y Más. 15 de febrero de 2020Desde el siglo XIV se levanta en Támara de Campos, Palencia, una de esas iglesias generosas y bellas que sorprenden al viajero con su piedra vainilla. Esta que nos ocupa lo tiene todo para dejarte arrobado con un interior que es pura filigrana mires por donde mires. Su reja negra y oro hecha en 1564 por el rejero Francisco de Osorno bien merece un poema, amén de un tratado sobre el arte de la forja. A su retablo principal, firmado el encargo en 1690 por Fernando de la Peña, obra que bien restaurada en la actualidad transporta al creyente, ya se le han dedicado innumerables escritos. Así que tanto a él, que costó en total 293.959 reales de vellón, como al órgano aéreo, único en el mundo según se cuenta y que reina a siete metros de altura sobre una columna, en esta ocasión no tintaremos la pluma para cantarlos.
Hoy vamos a
detenernos en el exterior del templo. Más concretamente en sus partes trasera e
izquierda que a partir del 28 de agosto de 2013 ya muestran al admirador el
limpio revuelo de sus arbotantes, recalcando los muros del ábside. Lugar donde
si el interesado baja la vista apreciará el foso venerable. Y si la eleva podrá valorar la
buhardilla al aire con su forjado de madera asombrillado por la cubierta.
Primera secuencia del derribo. Un vecino se acerca a conversar con el gruísta. |
Rocky, un vecino que no se perdió el acontecimiento, observando todo el proceso sin moverse de su puesto. |
Ahora ya podrá hacerlo con toda libertad, porque por fin se ha derribado el granero que durante déadas y décadas ha impedido la visión completa de la iglesia de San Hipólito. Ese cubo en ruinas daba un mordisco al monumento dejando su impronta en las fotos que tantos peregrinos deseaban llevarse de esa visión medieval única, aunque para hacerlo tuvieran que desviarse cuatro kilómetros del Camino de Santiago. Hablo del actual Camino, porque hasta hace pocos años Támara de Campos era por derecho una etapa del recorrido, como así lo atestiguan las conchas que guardan algunas rejas y lo que resta del antiguo Hospital de Peregrinos.
Pues bien. A partir
de ahora, las imágenes tomadas de la que ya es Basílica Menor de San Hipólito el
Real, no tendrán esa mancha cremosa que se comía un buen pedazo de sus
muros. Mancha que para minimizarla, cada fotógrafo que lo intentaba debía
convertirse en un contorsionista del Circ du Soleil o pasar horas de retoque para hacerla desaparecer, porque la práctica de construir al abrigo de los muros sacros ha sido una costumbre ancestral.
Después de años -y años- de gestiones se ha conseguido la eliminación de la ruinosa construcción. Porque el lector deberá saber que el citado cubículo perteneciente en su origen a los propietarios de la finca nº 1 de la calle Sinesio Delgado, el médico Dº Ismael y su esposa Dª Josefina, fue dejado en herencia a su hija Flora, quien lo donó al Ayuntamiento de la villa. A partir de ahí, la entidad no tuvo duda de que el antiguo granero debía desaparecer por el peligro de desplome. Además de lo inadecuado de aparecer situado junto a un monumento distinguido como una joya medieval de transición gótico-renacentista, por estar enriquecido con un lozano campanario conocido por La Moza de Campos.
Gracias a éste último derribo, la iglesia pudo verse por por fin limpia y completa (A.Mª.F.) |
Satisfechos, el contratista José Luis Montes y la alcaldesa Concha Gallardo. |
La alcaldesa de Támara de Campos, Concha Gallardo, con los componentes del coro navarro de Barasoain con ocasión de su actuación en la iglesia de S.Hipólito. (corobarasoain.com) |
Un ángulo interior con sus bellas nervaduras (Zarateman) |
El órgano, único en el mundo, sobre su columna (Zarateman) |
El costado izquierdo antes de derribarse la panera (Trotamundos minube) |
Para la Crónica de Támara, certificamos que el derribo se llevó a cabo durante todo el miércoles 28 de Agosto de 2013, desde las 8 de la mañana hasta última hora de la tarde. Que el conductor de la excavadora fue José Luis Montes, propietario de la empresa Construcciones San Telmo S. A., de Frómista, Palencia. Añadiendo que la operación se realizó bajo un fuerte viento noroeste que no dejó de arrastrar durante todo el día la intensa polvareda provocada por la demolición de las partes de tapial del edificio, cubriendo buena parte de los coches y cristales cercanos.
Y como puntilla anecdótica,
dejaremos escrito que a los nobles sillares restos de antiguas iglesias y
casonas, que formaban los muros de la panera hasta media altura, no dejaron de
lloverle pretendientes durante todo el día, con consultas tanto al chófer de la
excavadora como a la municipalidad, sobre la posibilidad que tenían los vecinos
de hacerse con alguna de las venerables piedras para enriquecer sus jardines y
patios.
Algo comprensible. No todos podemos presumir de almorzar mientras siete siglos nos contemplan.
Vídeo del interior de la iglesia mientras se escucha a Francis Chapelet, organero francés que ha vivido muchos años en Palencia:
Algo comprensible. No todos podemos presumir de almorzar mientras siete siglos nos contemplan.
Vídeo del interior de la iglesia mientras se escucha a Francis Chapelet, organero francés que ha vivido muchos años en Palencia:
Ana Mª Ferrin
Texto y Fotos
Viene a ser como le quiten a uno ese grano que le molesta y le afea el rostro.
ResponderEliminarUn saludo.
Hablando de "quitar", yo suprimí el "que" como si se tratara de otro estorbo más. Y no es así. Mis disculpas.
ResponderEliminarGracias, Cayetano. La intervención fue un éxito y la paciente ha quedado muy fotogénica, de muy buen ver,
EliminarRecuerdo haber estado junto a los muros seculares de esa impresionante maravilla, pero no creo haber estado dentro, quizás porque llegamos a una hora intempestiva y no estaban sus puertas abiertas (suelen estarlo en verano para que los turistas puedan disfrutarla). De esos momentos me llevé unas cuantas fotos, así es que puede ser que el establo aparezca por algún lado.
ResponderEliminarUn beso
PD Saludos al espectador peludo del evento que ahora estará enorme
Seguro que no estuviste, es una visión de esas que no se olvidan. Pero como en Palencia son así de chulos, no le dan más importancia.
EliminarSi tienes fotos, en el costado izquierdo de la iglesia casi en la parte trasera verás el granero
El espectador me manda decirte de su parte que se lo pasó en grande agitadísimo, revolcándose y lleno de polvo.
Felicidades por la Exposición de “Gaudí y su entorno”.
Besos
No he estado nunca allí, pero no hace mucho leí un artículo sobre su fabuloso interior -el órgano es único, desde luego-, y nada sabía sobre ese pegote ahora eliminado. Una fenomenal crónica, demostración de su oficio como escritora y periodista. Hasta las fotos son de primera.
ResponderEliminarUn saludo.
Como puse en el título, se trata de uno de esos sucesos minúsculos que nunca serán noticia, aún así, para los vecinos y los amantes de nuestro patrimonio fue un día importante y es un placer comprobar que sin ser de la zona a usted también le ha interesado ésta no-noticia. El pegote hacía imposible la visión completa o una foto real del exterior de la iglesia, aparte del peligro que significaba una ruina que cada día de viento perdía alguna porción de techo. En verano se enseña el interior y hay recitales del Festival de Órgano Ibérico, coros y otros apartados musicales de calidad.
EliminarSaludos
Ana María, qué espléndida publicación y reportaje fotográfico. Es como si me encontrara en el lugar el día 28 de agosto de 2013. Tenemos una casa en Lerma y todos los veranos estamos allá varias semanas. Este año, la iglesia de San Hipólito será visitada, por no sé cuantas veces pero teniendo en cuenta tu saber y sabor a libertad de construcciones falsas, que siempre han sido desagradables y han estropeado no solo la visión exterior de la iglesia sino los sillares de ese color vainilla que dices, estando tapiada. En realidad, todos los lugares de la provincia de Palencia los visitamos año tras año. El románico palentino y las iglesias como la de San Hipólito me encantan. La primera vez que tuve oportunidad de ver el órgano casi quedé petrificado y sí, creo que es único en el mundo. Acabo de indicarle a mi hermana (vive en Valencia), que debe ir a Burgos y León en viaje de trabajo (Universidad Politécnica), que te lea inmediatamente para que recuerde visitar la nueva pared libre de ruinas que la deformaban. Un relato tan intenso como un cuento presenciado por ti misma. Felicidades por poder vivir estas experiencias.
ResponderEliminarUn cariñoso abrazo, querida amiga Ana María.
Gracias por tu sensibilidad al saber ver la importancia de algo tan minúsculo como el derribo del granero. Me hablas de Lerma, que no conozco pero sé que son palabras mayores.
EliminarComo sabes, Támara es un piñón con cien habitantes que miman su villa. Pequeño, pero con toda la autenticidad que uno desearía encontrar en un lugar, cada verano acoge varios recitales de música y coros entre sus dos iglesias y es muy especial el del Festival de Órgano Ibérico, que este año se dará dos veces, en Julio y Agosto. Como vas por Támara, por si te coinciden las fechas ahí va la dirección de los recitales de órgano, querido amigo. http://www.palenciaturismo.es/export/sites/turismo/galeria/galeriaDescarga/EventosNuevos2013/Folleto_2013.pdf
¡Por fin una buena noticia en las redes!...Pregunta ¿Las fotos de esta crónica fueron tomadas por ti?
ResponderEliminarSus antiguos propietarios lo habían donado al pueblo, pero después de décadas sin que las autoridades tomarán una decisión sobre qué hacer con él, y como ya era un peligro público, la alcaldesa insistió en que se derribara, con muy buen criterio.
EliminarLas fotos que llevan mi firma, A.Mª.F, son mías, Alí.
Miedo me da pensar en las barbaridades que han podido hacerse con el patrimonio nacional y que desgraciadamente no han encontrado la sensibilidad de ese pueblo palentino.
ResponderEliminarGracias por el documentado reportaje.
Besos.
Me alegro de que te guste, JL. Si la vieras seguro que te encantaría.
EliminarEse monumento es una preciosidad y una maravilla más de las muchas que tenemos en España. No conozco esa iglesia basílica pero por tus imágenes ya impresiona esa joya arquitectónica del siglo XIV.
ResponderEliminarVeo muy bien quitar ese granero, pero yo no lo hubiese derribado. Lo hubiese desmontado piedra a piedra y lo hubiese situado cerca restaurado tal cual era y dando otro emplazamiento que no quitara la visión de la basílica, es una pena perder esa joya también.
Gracias por compartir y mostrarnos esa belleza arquitectónica.
Un abrazo amiga Ana.
Tu idea me parece muy acertada.
EliminarSupongo que no lo hicieron porque esas sencillas construcciones de tapial y piedras enormes son muy comunes por allí, hay muchas. Y el derribarlas, transportarlas, restaurarlas y adecuarlas con la mano de obra que supone, es un gasto enorme que no pueden permitirse.
De todos modos, muchas de esas magníficas piedras se llevaron para restaurar iglesias y conventos y alguna que otra se repartió entre los vecinos. Nada se perdió, amigo Juan.
Qué gran belleza de monumento, es una joya artística y ancestral de un gran valor.
ResponderEliminarGracias por traerla a este lindo espacio.
Un besito y mi gratitud
Pues ya lo sabes, Marina. Si te apetece una excursión, aquí te está esperando.
EliminarUn abrazo.
Olá, Ana Maria,
ResponderEliminarTeu texto e fotos estão excelentes, a 3ª foto é maravilhosa, e o seu interior tira a respiração, bonita demais, minha imaginação viajou por esse século...
Beijo, um bom fim de semana!
Gracias, Tais.
EliminarPara usted que tanto le gusta la música, aquí va el enlace a un video de la iglesia mientras se escucha un concierto de Francis Chapelet, maestro organero de París que ha vivido muchos años en la provincia de Palencia.
https://www.youtube.com/watch?v=Sw0J0lnD0tQ
A beleza dessa igreja jamais poderia ficar em meio a entulhos, a privar as pessoas de apreciá-la livremente por todos os ângulos. O senhor Prefeito tem motivos de sobra para estar contente de ver essa joia da arquitetura entregue aos moradores da província e também a turistas, que certamente ficariam felizes de conhecê-la.
ResponderEliminarUm ótimo domingo, Ana. Beijo. Pedro
Como habrá visto, se trata de una historia mínima. Pero de algo bueno, como tendrían que ser todas las noticias.
EliminarBuena semana también para usted, Pedro.
Bellísima basílica tanto su exterior cómo su interior.No comprendo cómo tardaron tanto tiempo en quitar esos muros en ruinas que entorpecían la vista de algo tan hermoso. Besicos
ResponderEliminarPuede resultar cómico. Pero si se te ocurre regalarle al pueblo cualquier inmueble, los gastos y problemas que se generan son tantos que se convierte en algo envenenado. Besicos a ti.
EliminarHe visitado tu blogs, Me encanta, este lugar en concreto no lo conozco, es precioso.
ResponderEliminarEnhorabuena y gracias por compartirlo con todos.
Con tu permiso me quedo por aquí para disfrutar del contenido.
Saludos.
Gracias por tu tiempo, José Aº.
EliminarEspero que encuentres txtos que te intresen.
Ha quedado fantástica después del derribo, el interior me ha encantado.
ResponderEliminarBesos.
Ya tienes otro lugar para comparar con tus paisajes de tierra adentro. Besos a ti.
EliminarPatrimonio que afortunadamente, tuvo doliente, porque sino...
ResponderEliminarCreo que estaré por esas tierras en el verano...
Besos
A ver si el tiempo se porta bien...
EliminarLa Tierra de Campos es magnífica, pero muy capaz de darte las 4 estaciones en un mismo día. Saludos, Manuel.
Es increíble la cantidad de belleza artística y natural que tenemos en nuestro país.
ResponderEliminarMe ha gustado mucho poder conocer de tu mano esta preciosa y recoleta Basílica.
Desde sus arbotantes es posible que eche de menos al antiguo granero,al fin y al cabo su compañero de fatigas del paso del tiempo, de los fríos y los soles de la tierra castellana.
Y, por cierto, se llevó alguien al final algún venerable resto del derribado granero?
Un saludo cariñoso.
Una visión poética, la tuya.
EliminarEs verdad que hasta al árbol más penoso y la caseta más humilde, el paisaje los echa de menos.
Un abrazo para ti, Conchi M.
Una hermosa secuencia fotográfica de ese derrumbe y de un hermoso lugar...
ResponderEliminarPaz
Isaac
Hola, Isaac, saludos.
EliminarLa panera se derribó porque así debía ser. Pero por su construcción con gruesos muros de tapial, de haberse restaurado seguro que resistiría mucho más que la mayoría de construcciones actuales.
Una catedral en un pueblo pequeño, inesperada para el visitante, que ha ganado mucho qcon el derribo de ese molesto granero. La cabecera luce hoy espléndida, en toda su magnitud. Enhorabuena a todos por ello.
ResponderEliminarUn beso
Para algún visitante ajeno al tema, la satisfacción del derribo entre los vecinos les parecía extraña, no entendían que algo en apariencia tan simple fuese tan importante para ellos. Sin comprender que no sólo se trataba de seguridad, también contaban la estética y el sentimiento de haber conseguido que la Administración viera las cosas desde su mismo punto de vista.
EliminarUn beso, Carmen
Uy, como me ha gustado esta crónica ilustrada con magníficas fotografías. Tengo unas enormes ganas de conocer tan bello monumento, pero no me ha llegado la oportunidad de hacerlo realidad.
ResponderEliminarA ver si este verano cuando vaya a Guardo puedo conseguir que alguien me lleve a visitarlo.
Me alegra mucho, que después de tanto tiempo, haya sido posible el derribo del granero y poder disfrutar de la belleza de la magnífica basílica.
Siempre es un placer visitarte, querida amiga.
Si te decides, seguro que te gustará.
EliminarYa te imagino haciendo contorsiones con la cámara y entrevistando a los vecinos y turistas. Gracias por tu tiempo, Maripaz.