Si una noche de fiesta, al utilizar el metro de Barcelona entre las estaciones de Sant Pau/Dos de Maig y Sagrada Familia, por un instante la oscuridad de los túneles se rasga y pasa ante sus ojos como una centella el nombre de "Gaudí", tranquilo, no se preocupe. Está usted en perfectas condiciones de sobriedad.
Lo que ha experimentado tiene su razón de
ser. Muy cerca del templo de la Sagrada Familia, bajo la entrada del metro
en el vértice de las calles Lepanto y Avenida Gaudí, se encuentra la estación de metro "Gaudí" que debía haber sido de la línea 2 y que hoy ha quedado olvidada en el trayecto de la línea 5, siendo la única de Barcelona que nunca ha llegado a utilizarse, la más famosa de las estaciones fantasma de la ciudad. Aunque los trenes pasen de largo sin parar en sus instalaciones solitarias, ha merecido varios
encuentros y viajes especiales, teniendo un buen mantenimiento que la conserva en condiciones de revista. Incluso en Navidades colocan luces y árboles con adornos (*).
Pero….
En Navidades, la estación "Gaudí" revive con adornos festivos. |
GAUDÍ. OTRO PAISAJE
Puclicado en Gaudí y Más. 3 de junio de 2017
En 2014 se conmemoró el
90º Aniversario de la implantación del metro de Barcelona con diversos actos
ciudadanos. El primero, a propuesta del canal
televisivo Discovery Max y muy difundido por los medios, fue una carrera de 10 Km, por las vías de ciertos
túneles donde 300 corredores completaron el difícil reto. En 40 minutos se recorrieron las 13 paradas de la prueba y fueron los ganadores, José Manuel Gómez y Francisco Jurado.
A las 141 estaciones que tiene Barcelona con sus 102,6 km. de vías, deberemos sumar otras 12 paradas inactivas como resultado de las sucesivas restructuraciones de la red. Entre ellas ésta, la "Gaudí", que aunque terminada para unir los sectores de Horta y el Paralelo nunca llegó a utilizarse. Abandonada definitivamente en 1968, según la Dirección por razones estructurales. Y si atendemos a otras voces, por falta de presupuesto.
Cuarenta años después, en 2008 con el fenómeno turístico de Antonio Gaudí ya en marcha, las mentes pensantes de ciertas áreas de la ciudad decidieron rescatar del olvido este recinto que se encontraba en perfectas condiciones. Sólo con una limpieza a fondo acompañada de iluminación y decoración adecuadas, la estación de nombre sugerente cuyas vías discurren junto a los muros del templo y su entrada a pocos metros, acababa entrando a formar parte del rico nomenclator de la ciudad. Por fin.
A las 141 estaciones que tiene Barcelona con sus 102,6 km. de vías, deberemos sumar otras 12 paradas inactivas como resultado de las sucesivas restructuraciones de la red. Entre ellas ésta, la "Gaudí", que aunque terminada para unir los sectores de Horta y el Paralelo nunca llegó a utilizarse. Abandonada definitivamente en 1968, según la Dirección por razones estructurales. Y si atendemos a otras voces, por falta de presupuesto.
Cuarenta años después, en 2008 con el fenómeno turístico de Antonio Gaudí ya en marcha, las mentes pensantes de ciertas áreas de la ciudad decidieron rescatar del olvido este recinto que se encontraba en perfectas condiciones. Sólo con una limpieza a fondo acompañada de iluminación y decoración adecuadas, la estación de nombre sugerente cuyas vías discurren junto a los muros del templo y su entrada a pocos metros, acababa entrando a formar parte del rico nomenclator de la ciudad. Por fin.
Metro de Barcelona. Der, línea azul, la 5, entre las estaciones de Sgda. Familia y St Pau, está la estación, "Gaudí" |
Durante una visita guiada, en la parada "Gaudí" |
Cartel de la carrera de 10 Km. para conmemorar los 90 años del metro de Barcelona en 2014. |
En el catálogo de leyendas urbanas quizá sean los subterráneos de Barcelona los que se llevan la palma de encuentros siniestros. Entre sus sombras, animales no identificados, cadáveres de serpientes y otras bien vivas con abundantes depósitos de huevos entre las vías. Más una legión de ratas y otra de cucarachas voladoras, africanas, que campan por el polvo de esos caminos sin sol.
En una ocasión alguien en quien confío me habló de haber visto con toda claridad, mientras su vagón avanzaba a toda velocidad por las sombras corredoras del túnel que nos ocupa, a varios individuos sin rostro saltando por sus salientes, escondiéndose en recovecos de los muros. Como para mí el valor de lo que me cuentan siempre está más en consonancia con la veracidad que me inspira el individuo, que en la rareza del relato, dejé aparcado el tema durante años sin desecharlo.
Dos imágenes de la estación "Gaudí" sin rótulo. Hoy Centro de Jubilados de antiguos trabajadores del metro. (A.Mª.F.) |
Estaciones de Sgda. Familia y Sant Pau/Dos de Maig. Entre ellas se encuentra la inactiva estación "Gaudí". (A.Mª.F.) |
Tiempo después, mientras veía un documental, el misterio se aclaró por sí solo al contemplar las aventuras de una nueva tribu urbana de las más atrevidas, que sitúan sus andanzas en nuestro subsuelo con el rostro cubierto. Después de informarme, aquí están algunos de los trackrunners, que así se conocen a sí mismos estos deportistas curiosos que funcionan al margen de normas. A medias atletas, a medias interesados por lo que nos rodea, para compartirlo con otros iguales que por diversas causas nunca llegarían a su arrojo. Fotografían y filman sus secretos saltándose las normas al forzar la seguridad oficial buscando siempre la protección del anonimato (**).
Primera fase. Identificación de las entradas que se encuentran a pie de calle. Dios sabe cómo, abren sus cerraduras. |
En el anonimato de sus rostros cubiertos, los trackrunners, miran a la cámara. |
Los túneles del metro han sido objeto de inquietud para muchos niños que crecieron pegando su nariz al cristal de la ventanilla, imaginando guaridas de monstruos entre sus sombras animadas por las luces de la máquina. ¿Saltarían alguna vez sobre los vagones, surfeando sobre los pasajeros? Y de ser así: ¿Se colgarían para dejarse ver a través del cristal?
Las leyendas más numerosas aluden a que por los túneles vagan fallecidos, espíritus de los suicidas que un día se arrojaron a las vías. En otras se cuenta que son los mismos empleados quienes han oído el conocido pitido, su soplido singular, cuando el metro pasa por la estación por la que todos saben que ya ha salido el último tren de la noche. Incluso que, en medio del silencio pueden sentir el potente rebufe de aire, como si el convoy invisible pasara a toda velocidad camino de los túneles.
Pero no lo crean. Aún con pocos datos, ningún permiso y menos coordenadas, las afortunadas grabaciones del grupo de trackrunners han dejado testimonio de que bajo nuestros pies no vagan zombis, al contrario, la vida palpita. Joven y curiosa.
Ana Mª Ferrin
(*) http://www.cultruta.com/sobre-nosaltres/contacte/
(**) http://systemboys.net/trackrunners-barcelona/
La frase que me ha hecho rememorar mi infancia en Madrid ha sido precisamente esta tuya:
ResponderEliminar"Los túneles del metro han sido objeto de inquietud para muchos niños que crecieron pegando su nariz al cristal de la ventanilla, imaginando guaridas de monstruos entre sus sombras animadas por las luces de la máquina."
No hay nada más cierto. De pequeño había elementos de las estaciones que me sobrecogían: la boca del túnel eran las fauces de un monstruo que engullía los trenes. Los carteles eran espantosos, algunos de lo más tétrico, como ese de una rata y un ratero de perfil, de rostro verdoso, que no sé qué diantres anunciaba, presumiblemente un matarratas... Y también esa otra estación fantasma que seguimos teniendo, la de Chamberí, hoy también reciclada como museo donde los visitantes pueden pasear por una estación antigua de los primeros tiempos, con la publicidad en paneles de cerámica, etc.
Un saludo.
Recuerdo el cartel con algo verdoso y no sabría decir qué era más repugnante, si la rata o el ratero.
EliminarLos terrores infantiles son todo un género. Para la hija del escultor Subirachs, su reto de valentía era entrar de noche en el espacio donde se encontraban las figuras ya realizadas y caminar entre las sombras que proyectaban, sin dejar de pensar qué o quienes se escondían tras ellas.
Saludos.
Todo un mundo misterioso subyace en esos túneles del metro. Es fácil imaginarse que en ellos habitan zombies, pero viendo uno de los vídeos que nos muestras de los Trackrunners, se ve que palpita su vida joven como bien dices debajo de sus capuchas e invisibles caras.
ResponderEliminarMe ha encantado.
Muchos besos.
Sobre el qué nos asusta, a qué le tenemos terror, cada uno responderíamos algo distinto. Lo que a uno le pone los pelos de punta, a otro no le afecta. ¿A qué le tienes tú miedo...?
EliminarMás vale, Ana María,un Metro misterioso y subyugante, que alguno rutinario y sin encanto.
ResponderEliminarHoy se hacen visitas por algunas estaciones abandonadas, hay gustos para todo. Desde luego la adrenalina debe ir a mil...
EliminarAndei um pouco contigo, Ana, por este misterioso metrô de Barcelona, que o ano de 2014 marcou seus 90 anos de existência, com as suas 141 estações, no trecho de 102,6 km. de vias, sendo que uma dessas estações chama-se Gaudí, se entendi bem. Também tomei conhecimento de que Barcelona homenageou Gaudí, dando o seu nome a uma de suas avenidas. As fotos enriquecem muito essa bela postagem. Parabéns.
ResponderEliminarUm abraço, Ana.
Se llama Gaudí, aunque está cerrada y puede verse a toda velocidad cuando se viaja por la línea 5. Desde 1968 que se construyó, hasta 2008 en que se rescató, no se había estrenado. Ahora, de vez en cuando se hace algún viaje con un metro turístico y se visita.
EliminarGracias, Pedro.
Boa tarde, os metropolitanos transmitem sempre um pouco de mistério causados pelos seu interior e barulhos, as fotos mostram bem os túneis.
ResponderEliminarAG
Buen tema para inspirar un guión de suspense, AG.
Eliminar"no creo em bruxas pero que las hay, las hay.
ResponderEliminarbeijinhos, Léah
Hola, Léah, bienvenida. Si tú lo dices, algo sabrás...
EliminarPara mi, este halo de misterio, hace que en este caso el metro, tenga su encanto.
ResponderEliminarLos fantasmas, forman parte de nuestra idiosincrasia, de nuestras costumbres...De pequeño era La Sayona, quien asustaba nuestras mentes, ahora hay otros fastanmas...
Besos
Esta Sayona, que no conocía, debió ser amiga del Hombre del Saco, del Fraile Motilón o del Sacamantecas, todos personajes con los que se nos asustaba a los niños.
EliminarSaludos, Manuel
Dejo los fantasmas ya que no soy muy misteriosa, pero en cambio me ha gustado descubrir estas estaciones inhabitables que existen en Barcelona, espero que la de Gaudí llegue un día el presupuesto para rehabilitarla de nuevo.
ResponderEliminarUn abrazo
No se llego a estrenar por un cambio político o un error de trazado, una inversión sin sentido, sabe Dios. La realidad es que son tres estaciones a un paso una de otra.
EliminarAbrazo para ti.
Nunca he llegado a tomar la línea entre esos dos puntos pero es posible que si lo hubiese hecho no me hubiese fijado en esa estación fantasma. Desde la Sagrada Familia hasta el hospital de Sant Pau hay un paseo agradable tomando el sol.
ResponderEliminarUn beso
Están muy cerca pero como una está en el Hospital de San Pablo, la otra en el templo, hay personas que por tener problemas de movilidad, o cuando hace mal tiempo, como la de Sgda. Familia enlaza con otras líneas, tienen bastantes pasajeros. Besitos para vosotros.
EliminarReallynice photos. The metro looks very exciting
ResponderEliminarEn lo profundo del andén, allí donde la oscuridad comienza su punto de fuga, empieza un relato. Asoma Patricia Highsmith...
Eliminar¡Hola Ana!
ResponderEliminarEl fantasma de Gaudí, claro está que existe, en sus importantes Obras de Arte por los siglos de siglos Amén.
Pues lo que se aprecia de esa estación, no parece estar nada mal, pero sabes, lo que más me gusta es ese atardecer que encabeza tu post. Me encanta!!! Gracias por tu buen hacer. Es un placer pasar por tu bello rincón.
Te dejo mi gratitud por tu huella importante para mi.
Un besito y, se muy feliz.
Estaba enfocando una iglesia y al mover unos centímetros la cámara me topé con la imagen. Disparé una ráfaga y en la segunda foto ya se había descompuesto el posado.
EliminarUn instante de suerte.
Gracias. Otro para ti.
Hola; Misteriosa historia la que nos cuentas y me imagino las historias de aparecidos que habran naciado a lo largo de los años. En Buenos Aires, donde vivo, existe una historia parecida. En 1913 se inauguró el subte linea A, existía entre tantas una estación llamada "Pasco Sur" que se clausuró en 1953 y quedó tapiada, nadie la ve, pero ella esta allí sembrando misteriosas leyendas.
ResponderEliminarUn abrazo, me gustó tu relato.
mariarosa
Esta nunca se tapió, quedó como una visión pero tenías que saber que estaba allí y estar atento para verla, por circular el metro a gran velocidad. Ahora, de vez en cuando hay visitas y si lo solicitas puedes verla (espero que siga así).
EliminarUn beso para ti y tu espléndida ciudad
Una de nuestras estaciones de metro pasa por dos importantes cementerios de mi país y, se denomina de esa forma: Cementerios. Ya imaginarás, la cantidad de historias que relatan los frecuentes pasajeros que por allí transitan.
ResponderEliminarMuy interesante tu Blog y agradecida de tu visita.
Un gran abrazo.
Las cosas claras: El nombre está muy bien puesto.
EliminarOtro tema es que sin tener que ir en especial a ese sitio tengas que cruzar varias veces el nombrecito y ver la pena de quienes acaban de perder a un ser querido.
Abrazos para ti.
Todo un misterio. Leyendas que realmente hacen pensar.
ResponderEliminarMuy buenas las fotos.
Un fuerte abrazo.
Amalia, qué sería de la vida sin un poco de misterio, o al menos sin que algo te lo sugiera...
EliminarGracias por tu visita, Ana Mª Ferrín.
ResponderEliminarMe he pasado por tu blog y me ha fascinado tu conocimiento acerca de Gaudí.
La verdad es que nuestro Gaudí es pura magia y se ha de tener un gran conocimiento acerca de este artista para hablar con tanto conocimiento de causa como lo has hecho tu.
Y esas fotos que ilustran la entrada no tienen precio.
Te doy mil veces gracias.
Un abrazo.
Celebro que te haya interesado el tema. Tenemos genios con talento para exportar, así que reivindicarlos es casi obligatorio. Y más cuando invirtieron su vida para dejar a la posteridad un legado de belleza.
EliminarFuerte abrazo, Tecla.