LA CONRERÍA. COCINA, SACERDOCIO Y RECREO

Ya no es cuestión de cocinar una paella en pleno campo, como cuando no éramos europeos y se nos disculpaba la salvajada porque se comprendía que estábamos por civilizar. Aunque fijaros qué cosa más curiosa, entonces era rarísimo ver arder nuestros bosques. Hoy mejor serán para nuestra imagen comunitaria unos filetes de merluza sin piel ni espinas cortados a tiras, macerados dentro de una espuma de ajo, laurel molido, perejil, sal y aceite, conseguida con una batidora y rebozadas en una mezcla de harina, huevo, levadura y azafrán, fáciles de guardar y transportar.

Cartuja de Santa María de Montealegre, Tiana, Barcelona.
Día de niebla. (Foto: Carquinyoli from Badalona)

EL PAISAJE

Publicado en Sant Andreu Express. Diciembre de 1986

 

            

              Para estos días tranquilos que se avecinan propongo un viaje con trayecto de muy pocos kilómetros hacia los montes de La Conrería de Montealegre entre Mollet i Montgat, en terrenos que son agregaduría de Tiana.

                     Un termo lleno de consomé y otro con café nos pueden dejar como un reloj bajo ese pino gemelo del glosado en Formentor por Miquel Costa i Llobera:

“Mon cor estima un arbre

més vell que l’olivera,

més poderós que el roure,

més verd que el taronger.

Conserva de ses fulles

l’eterna primavera

i lluita amb les ventades

que atupen la ribera

com un gegant guerrer…(*)

 GRACE Y RAINIERO DE MÓNACO

             

             Uno de los muchos sacerdotes salidos del Seminario de La Conrería fue José María Montfort, hoy párroco de La Roca. Él nos cuenta cómo acompañados por el Barón d’Esponellà, don Epifani Fortuny, los seminaristas hacían por los aledaños rudimentarias excavaciones en las que aparecieron abundantes vestigios arqueológicos. El perfil de este mecenas es apasionante para cualquier amante de las biografías intensas. Viajero, cónsul honorario de Mónaco visitado por los príncipes Grace y Rainiero cuando estuvieron en Barcelona, hoy ofrece al estudioso su biblioteca y su colección de hallazgos en la mansión Can Sanromà para ser visitadas sábados y domingos.

            Tiana guarda en cantidad casas de recreo –con preferencia modernistas–, donde Pilar Prim o Mariona Rebull (**) hubieran vivido en plenitud sus avatares literarios. También Isaac Albéniz –por cierto, tío del recientemente fallecido José Maria Ruiz Gallardón–, paseó sus calles empinadas con asiduidad y los vecinos dejaron constancia de ello en una ecléctica placita y una avenida con el nombre del autor de la sinfonía Catalònia

  

Casa de La Punxa en Tiana, construída en 1903 por Roderic Robert

LOLA ANGLADA


              Pero no es una localidad dormida. Hoy acaban de celebrar el aniversario de su parroquia, donde se venera un precioso altar barroco del siglo XVIII, se admiran las exposiciones en la Casa de la Punxa, donde se ha fallado el premio de pintura, y se sube al domicilio de Lola Anglada, hoy convertido en el restaurante “L’Hostalet”. Sólo con solicitarlo, su amable propietaria muestra documentos, obra y recuerdos de la ilustre artista plástica, mientras las jóvenes locales pasean su guapeza haciendo exclamar al cliente que apura un cremat (3): “Renoi, la raça va millorant! (4) 

Ana Mª Ferrin

(1)  Mi corazón ama a un árbol
más viejo que un olivo,
más poderoso que el roble,
más verde que un naranjo.


Conserva de sus hojas
la verde primavera
y lucha con los vientos
que tupen la ribera
como un guerrero gigante...


(2) Ambos nombres dan título a dos famosas novelas. Pilar Prim, 1906, de  Narcís Oller, y Mariona Rebull, 1943, de Ignasi Agustí


(3) Bebida alcóholica a base de colcocar en una cazuela de barro, ron, unos granos de café, azúcar, piel de limón y canela. Se prende fuego y se deja que arda unos minutos para que pierda una parte del alcohol. Se sirve de preferencia en tazas y es típica acompañante del canto de habaneras.


(4) Rediez, ¡la raza va mejorando!